Lagartijas de lava de Galápagos: pequeñas y diversas

Escrito por Christopher Klassen

Tiempo de lectura: 4 minutos

Arrastrándose por los arbustos y grupos de rocas que conforman las islas encantadas, la lagartija de lava de Galápagos entra y sale de sus diminutos nichos para examinar a los pesados gigantes que se arrodillan para observarlos. Son casi tan ubicuos como los leones marinos de Galápagos que parecen estar en todas las playas de Galápagos, pero no son tan intrépidos ante nuestra presencia como los primeros. Pueden posar y congelarse momentáneamente, pero son un poco más asustadizos que los propios leones marinos. A menudo, parecen ser las únicas cosas que se mueven sobre los fascinantes campos de lava negra en todo el archipiélago.

Son tan omnipresentes que Charles Darwin, cuando acampó en la isla Santiago (una de las 4 islas que visitó y acampó en 1835) dijo que había tantas lagartijas de lava e iguanas terrestres que apenas logró encontrar un lugar para armar su carpa.

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Los siete magníficos

En una nota similar, estas pequeñas criaturas son en realidad un ejemplo perfecto de su teoría de la evolución por selección natural. La ciencia ha descubierto evidencia que arroja luz sobre la posibilidad de que las siete especies de lagartijas de lava que se encuentran en el archipiélago en realidad evolucionaron a partir de una única especie parental. Cuando se examina de cerca, uno al lado del otro, el lagarto de lava de Galápagos muestra sólo ligeras variaciones en su forma, color y comportamiento. Cada especie habita en una isla diferente, lo que indica que cada especie evolucionó de forma aislada y de alguna manera estuvo separada por barreras físicas que ya no están presentes y, en consecuencia, les permiten reproducirse independientemente unas de otras. Es por eso que puedes encontrar diferentes tipos de lagartos en nuestro tours a las Islas Galápagos.

Curiosamente, la séptima especie de lagartija de lava habita toda la porción norte y central del archipiélago. ¿Por qué? Algunos postulan la idea de que esta zona del archipiélago podría haber estado interconectada cuando había niveles más bajos del mar. Como resultado, no es tan descabellado considerar la idea de que esta séptima especie también evolucionó de forma aislada, salvo que evolucionó en un área masiva del archipiélago que finalmente se convirtió en varias islas diferentes. Aquí hay una lista de todas las especies de lagartijas de lava:

Galápagos – habita en toda la región occidental y central del archipiélago.
Española
Floreana
Marchena
Pinta lava
Pinzón
San Cristóbal

El Diablo está en los detalles, el ángel está en las Islas

Cuerpos delgados, cabezas puntiagudas y colas largas, las lagartijas de lava de Galápagos se parecen más a una versión elegante y deportiva de la fornida iguana terrestre. Sin mencionar que incluso tienen un "acabado" más cautivador. Distinguir las siete lagartijas es bastante difícil, pero lo conveniente es que cada especie única es exclusiva de cada isla individual (salvo la occidental y la central). Las lagartijas de lava son relativamente pequeñas, y tendrás que verla varias veces para asegurarte de que es una lagartija de lava lo que viste y no una ramita que cae o una hoja errante.

Sus colores también son perfectos para camuflarse bajo la flora de las islas, y sus tonos dinámicos a menudo no solo difieren entre especies, sino también entre una misma especie. Pueden variar de gris a verde o de marrón a negro. Afortunado es el visitante con ojos ávidos que logra detectar una lagartija de lava con fascinantes motas y rayas de oro o cobre. Los machos tienden a ser más grandes que las hembras, y estas últimas tienen una garganta roja de color distintivo. Su tamaño tiende a promediar entre 5 y 6 pulgadas de largo, pero se ha registrado que algunos miden un pie.

Contendientes pequeños pero intrépidos

A pesar de su tamaño minúsculo, las lagartijas de lava de Galápagos tienden a mostrar poco o ningún temor ante la presencia de humanos, cuando se trata de su propia especie, sin embargo, pueden ser bastante territoriales. Usando una técnica divertida que implica un movimiento similar a "flexiones de pecho", las lagartijas de lava expresan su dominio moviéndose hacia arriba y hacia abajo en forma paralela al suelo. Los machos suelen utilizar esto para proteger el territorio que los rodea (que suele estar ocupado por hembras). En el caso de que esto no funcione, la pelea puede derivar en mordiscos o coletazos.

Para ayudar a protegerse contra los depredadores, confían en el mecanismo de defensa más simple – el camuflaje. Se ha observado que las lagartijas de lava cambian de color para mezclarse de manera más eficiente con el entorno que los rodea, generalmente en respuesta a los cambios de temperatura o al sentirse amenazados. También ejercen la notable habilidad de desprender su cola de sus cuerpos en caso de que un depredador los atrape. Las colas desprendidas sirven como un buen señuelo para los depredadores, ya que siguen retorciéndose en el suelo después de quedarse atrás. Afortunadamente para las lagartijas de lava, sus colas vuelven a crecer.

¡Y no dejes que su tamaño te haga subestimar su importancia en las islas! Estas pequeñas criaturas son un factor clave para ayudar a mantener las poblaciones de insectos (langostas, polillas, moscas, escarabajos, arañas y hormigas) en niveles decentes. También se han observado lagartijas de lava en Galápagos comiendo plantas secas, lo que hace que su dieta sea bastante dinámica. Esto significa que durante eventos como El Niño, la lagartija de lava de Galápagos es capaz de soportar cambios tan dramáticos en los patrones climáticos.